JEEP COMPASS T270 – 2023

Cambio de Ritmo

Vivir en la ‘jungla’ de cemento de las grandes ciudades, moverse en ella y, al mismo tiempo, tener una sonrisa amigable, solo es posible cuando la cotidianidad se pasa a bordo de un auto confortable, seguro y agradable. Esa es la misión del nuevo Jeep Compass Longitude.

Cambió todo. Desde su motor hasta su ‘pinta’, el nuevo Jeep Compass Longitude es el génesis de un nuevo producto del portafolio de la marca estadounidense en Colombia, dirigido a quienes viven la cotidianidad de una ciudad convulsionada y de alto tráfico.

Fabricado para disfrutar de las carreteras colombianas y del pavimento de las grandes ciudades, este crossover con tracción delantera (4X2) mantiene el auténtico diseño exterior de Jeep. Es más, puede decirse que ahora combina la artesanía clásica de la marca con la modernidad.

Esta vez, el Compass proviene de la planta de Goiana, al norte de Pernambuco (Brasil), y es el lanzamiento de su tercera generación. Para recordar, este crossover de apariencia todoterreno llegó a Colombia en el 2007 y, años más tarde, en el 2016, se presentó su segunda generación.

Ahora, con un completo rediseño de varios componentes de esta camioneta, el Compass 2023, disponible ya en Colombia, ofrece una apariencia nueva, distinguida que se ve diferente en el pavimento, como en vías destapadas. Para la trocha, a futuro, estará disponible una versión 4X4 conocida en otros modelos de la marca como Trail Rated Trailhawk. “El nuevo Jeep Compass Longitude marca el comienzo de nuevos niveles de comodidad y funcionalidad, con estilo y acabados premium. Trae un nuevo e impresionante diseño interior y la adición de varias características de seguridad avanzadas estándar que lo hacen aún más deseable en el segmento de los SUV compactos en el país”, dijo Adriana Casadiego, directora general de Jeep Colombia, una marca de la multinacional Astara.

Por supuesto, refleja el dinamismo y el poder de Jeep. “Al rediseñar el Jeep Compass, el objetivo fue crear una diferenciación visual para expresar y celebrar las personalidades únicas en carretera y todoterreno del vehículo. Hay una transformación notable cuando ves el nuevo Compass dirigiéndose hacia ti, y es aún más evidente cuando comparas los modelos dentro y fuera de la carretera uno al lado del otro. Las nuevas apariencias frontales de ambos son innegablemente Jeep, pero ahora son expresivamente diferentes para reflejar un espíritu de individualidad”, explicó Tim Anness, director de Core Design Group”.

ÍCONO, POR SIEMPRE

l comparar el nuevo Jeep Compass con su antecesor, se nota de inmediato el cambio hacia un diseño más refinado, sin dejar de lado su robustez. El secreto está en la nueva parrilla de este vehículo que, al mismo tiempo que se presenta moderna, cuenta con las siete ranuras; símbolo histórico y contundente de Jeep en la industria automotriz mundial.

Lo actual está en los detalles de color negro que se aprecian en las siete ranuras de la parrilla, en una tendencia de diseño conocida como High Gloss Black, que seguramente veremos en otros modelos de la marca, y que atrae la atención de los transeúntes hacia las nuevas unidades de luces delanteras con tecnología Led, ahora con un dibujo más delgado y expresivo.

Igualmente, el paquete incluye las luces de circulación diurna DRL, las luces antiniebla también Led y las unidades de luces posteriores premium Led con ayuda antiniebla que hacen parte de los sistemas de seguridad activa y pasiva de este vehículo.

Un aspecto diferente es que la parrilla es proporcionalmente más grande que la de su antecesor. Los ingenieros de Jeep aseguran que de esa manera se maximiza el flujo de aire que se requiere en el tren motor. Esto agrega una apariencia agresiva que, al mismo tiempo, se combina con la fascia negra mate que muestra biseles de luces antiniebla integrados: ahora más grandes.

Esta versión Longitude se destaca, además, por sus rines de 18 pulgadas BSW que calzan unos neumáticos 225/55. Es un buen ancho de llanta y un perfil medio que le permite rodar con resistencia y estabilidad, tanto en pavimento como en carreteras de difícil adherencia.

Sin duda, el diseño de este vehículo es un derroche de estilo y de personalidad que, al mezclar la modernidad con el espíritu clásico de la marca, ofrece una imagen distinguida a los transeúntes con una distancia al suelo considerable.

MOTOR TURBO Y CAJA AISIN

Bajo el capó, los ingenieros de Jeep ofrecen la novedad más importante de este vehículo: un motor de 1.332 cc turboalimentado, que reemplaza el anterior TigerShark de 2,4 litros que es muy conocido en Colombia en otros modelos de Jeep, y una nueva transmisión Aisin de tercera generación y de 6 velocidades. 

La sobrealimentación promete la misma eficiencia, pero con bajo consumo en ciudad y menores emisiones contaminantes en el medio ambiente, que es la real intención de Jeep en todos sus icónicos modelos que, incluso, ya entraron en modo de electrificación.

Para muchos, este paso a un motor turbo es una movida inteligente para completar el portafolio de la marca en Colombia. Se requería de una camioneta de su tamaño, pero con todas las bondades que ofrece la nueva tecnología de motores.

Este propulsor ofrece ventajas tecnológicas que lo hacen adecuado a las condiciones de manejo en el país. La distribución es por cadena, que lo hace libre de mantenimiento, con un solo árbol de levas arriba de la culata que está comandado por el sistema Multiair de 16 válvulas, distribución variable en el tiempo de las válvulas en entrada y escape, y con un turbo compresor fijo.

El resultado: 173 caballos de potencia (2 más que el de 2,4 litros) y 270 Nm (ahora 40 más) a partir de 1.850 RPM. Muy bueno para un vehículo familiar, de tamaño mediano y con un peso reducido en vacío de 1.557 kilogramos que explican sus buenas prestaciones.

Llama la atención del manejo de este motor con la sobrealimentación. Al tener un solo árbol de levas (SOHC), los ingenieros buscaron tener una mayor curva de torque que, al mismo tiempo, compensa el trabajo del turbo que empieza a ofrecer su potencial desde las 1.850 RPM.

Como todo propulsor multivalvular, a partir de las 3.000 RPM la capacidad de motor se siente con contundencia. Es más, la curva de potencia corta la inyección a las 5.700 y esto explica el por qué esta camioneta mejoró notablemente su desempeño en carretera.

La caja automática es completamente nueva, es Gen III de Aisin de 6 velocidades que cuenta con relaciones cortas en todas las marchas que se traduce en una conducción agradable y receptiva en la difícil topografía colombiana.Las transmisiones Aisin tienen una larga tradición de calidad y de confiabilidad. Es de convertidor de torque, no es CVT, y está hecha para proteger todo el conjunto motor de aceleraciones innecesarias. Hay que recordar que es una camioneta familiar.

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