LA RECETA GANADORA
El reto de los autos eléctricos siempre será la carga de energía. A la humanidad, le ha costado cambiar más de un siglo esa costumbre de ir a la estación de combustible, llenar el tanque y solo preocuparse por repostar cuando el sensor lo indique. La solución es e-Power.
Porque buscar una estación de gasolina o diésel o, incluso, gas natural es relativamente sencillo en un país como Colombia, que tiene una aceptable red de estaciones de servicio. Otra cosa es buscar en donde recargar un auto eléctrico.
Nissan encontró la receta de poder cargar la batería del auto eléctrico sin ‘enchufarlo a la pared’ y tampoco ‘al sol’. Y, para eso, sus ingenieros empezaron a desarrollar desde el 2007 una tecnología llamada eléctricos del rango extendido y que la evolucionó hasta crear e-Power.
Claro, el tema de la electrificación ha estado presente en Nissan desde 1947, con el Tama, que se vendió como versión de pasajeros y otra de camioneta de reparto. Este vehículo fue el génesis del departamento de investigación de autos eléctricos de japonesa a mediados del siglo pasado.
“La tecnología e-Power democratiza hoy el auto eléctrico en el mundo. Permite que todas las personas cambien sus autos de combustión a eléctrico sin esa ansiedad y preocupación de enchufarlo a la red doméstica o pública cuando la batería se agota, porque se aprovecha de un motor de combustión como generador de electricidad”, dijo Rodrigo Centeno Caballero, Marketing SR Director at Nissan Mexico & NIBU (Latam).
Funciona de manera contraria a lo que hace un híbrido convencional (HEV) o enchufable (PHEV). En la tecnología e-Power, el motor de combustión nunca interviene en el movimiento del auto en ningún momento del impulso; simplemente es, como decimos en Colombia, una planta eléctrica.
Como el motor de gasolina no mueve las ruedas, pues el vehículo no está sujeto a los cambios de velocidad ni a las demandas de aceleración. Esto quiere decir que funciona a regímenes estables y eficientes durante períodos de tiempo muy prolongados.
Obviamente, si quien conduce exige mucha aceleración, pues la planta de energía (léase motor de combustión) se verá obligada a producir más electricidad para evitar que el motor eléctrico que es el que mueve el auto, se quede sin ella.
¿CÓMO FUNCIONA?
Entonces, con el fin de hacer una radiografía de este sistema de movilidad eléctrico, La tecnología e-Power se compone por una batería de ion de litio liviana y compacta, en donde hay dos motores, pero sólo uno interviene en la movilidad: el eléctrico.
Es el motor eléctrico es el que está conectado a las llantas, a la realidad, y que se alimenta como ya se sabe, de una batería que almacena la electricidad que necesita para funcionar. La ventaja es que no tiene que enchufarse y siempre actúa como un auto eléctrico.
A este sistema, se le adiciona un inversor compacto y liviano que gestiona la energía eléctrica que produce el motor de gasolina o de combustión que solo genera energía eléctrica, pues no necesita de grandes cilindradas, ni mucho menos de una enorme potencia y torque para funcionar.
Por eso, la batería del sistema e-Power se carga automáticamente, sin necesidad de un cargador externo, gracias al motor a gasolina, que actúa como planta eléctrica. Solo se necesita de un motor pequeño, incluso de 3 cilindros, para generar la carga necesaria.
De esa manera, conducir con la energía provista por las baterías provee una experiencia de manejo silenciosa, característica de los vehículos eléctricos. Lo mejor de todo, es el torque: es inmediato (como un metro eléctrico) y siempre es el mismo.
e-POWER, PURA ENERGÍA ELÉCTRICA
Para una rápida aceleración del auto, entonces, la energía es suministrada por la batería y trasladada hacia el motor eléctrico. Cuando el vehículo desacelera, el freno regenerativo captura y almacena la energía en la batería, lo que aumenta la eficiencia del combustible.
Como es un auto eléctrico, el e-Power convierte la energía cinética que se produce en las frenadas y en la desaceleración regenerativa, en eléctrica. Y, con el convertidor, la pasa también a la batería, lo que garantiza tener siempre la carga en el ciento por ciento.
Por eso, e-Power presenta autonomías de 900 y 1.000 kilómetros sin preocuparse por la alimentación del motor eléctrico. Y, a esta realidad, se suma que el motor de gasolina que se usa como generador eléctrico es de muy baja cilindrada: no necesita mucha gasolina para funcionar.
Un consumo mínimo porque ni siquiera ese motor de gasolina participa en el arranque. No interviene para nada en la función del auto, excepto para dar electricidad a una batería que, como en todo auto eléctrico, se ha instalado en la base de la carrocería.
El tiempo de generación de energía se controla en función de la velocidad del vehículo, el grado de aceleración y el nivel de carga de la batería. A velocidades bajas y medias, como en áreas urbanas, el motor funciona mayoritariamente con la energía provista por la batería.
Al soltar el acelerador, el freno regenerativo se activa y la batería se carga con la electricidad que se genera en la desaceleración. Cuando se requiere una aceleración rápida o instantánea, o más potencia en un manejo deportivo, la energía puede ser provista hacia el motor eléctrico por la batería y por la planta eléctrica (motor de gasolina): así el vehículo responde siempre eléctrico.
La tecnología Nissan e-Power entrega las prestaciones de un vehículo eléctrico, con buen rendimiento y alto nivel autonomía, en todo momento. Esa es la diferencia y el por qué, primero en Japón y ahora en Europa, ha sido una revolución en la industria automotriz.
